domingo, mayo 24, 2009

caminando entre la multitud.

Photobucket

Es increíble el número de personas que conoceremos durante el tiempo que vivamos, y qué tan pocas serán aquellas que dejen sus huellas en nosotros.
Pero no pensemos ahora en las personas que cambiaran nuestras vidas; pensemos en aquellas que pudieron hacerlo, pero que por distintas razones no tuvieron la oportunidad. Pensemos en la mujer que camina a nuestro lado entre la multitud rutinaria, en el compañero de trabajo cuyo nombre nunca recordamos al saludarlo por la mañana, en el niño que jugaba en la fuente cuando caminabas por la plaza. Y sus vidas seguirán como lo hará la nuestra: sentirán amor, sufrirán decepciones, se alegrarán, los acompañará la soledad, abrirán los ojos una mañana para descubrir el cielo y después los cerrarán para no volver a verlo. Pero eso, nosotros, no lo sabremos. Los recordaremos como aquella mujer entre la multitud, el compañero de trabajo, el niño en la fuente; y los olvidaremos quizás unos minutos más tarde para nunca más recordarlos, para no recordar que sus vidas, siendo tan valiosas como las nuestras, nunca se tocaron. Y ellos no recordarán nuestros rostros, ni imaginarán en dónde estaremos cincuenta y siete horas más tarde. O, tal vez, jamás se percataron de que alguien vivió a su lado por una fracción de segundo.
Así seguirá la vida, como un monton de lineas que, pudiendo tocarse, se pasaron de largo.

4 comentarios:

Richard Hill dijo...

Aveces coincidimos en demasiadas ideas y pensamientos. Justo ayer pensaba en todas esas cosas que olvidamos practicamente el mismo instante en que las vivimos. Los Rostros y las personas no son la excepcion..

Anduve mandando bulletins en myspace y facebook con la frase..

" El mas sentido pesame a todas las cosas que olvidamos el mismo instante en que las vivimos "

La memoria podria ser el peor asesino.. O todo un tianguis cerebral con toda clase de reliquias y antiguedades..

Y si, buen escrito y bastante acorde a mi manera de pensar y ver a las personas cuando me pasan por enfrente..

Wiz dijo...

Y que bonito y diferente también es cuando saludas a una de esas personas o le sonríes. Incluso un cumplido...

Me gustó lo qu escribiste y es así como se ve la gente un día normal en una calle transitada....ya ni siquiera la miramos....

...por los momentos vividos en un día de olvido frente a aquel mar de gente, salud.

pAoLa* dijo...

Que gran actu, me encanta tu post, la verdad es que és el día a día. Tienes razón, ¿cuanta gente? puuff ni lo sabremos... y todas con nuestras distintas vidas...lo que has escrito hace que quien lo lea, se pare a pensar en ello durante un rato, por lo menos es lo que me ha pasado.

BESOS!!

Victoria dijo...

Yo creo que todo se resume a que somos todos estrellas fugaces...y brillamos por un rato, perecemos y somos olvidados. Creo que expresaste muy bien lo que pienso a veces cuando voy al centro.
Hay tanta gente acá.

Saludos.